¡Vaya, un esguince!

- Venga perfecto, pues mañana a las 9h. nos conectamos y hacemos la formación!

- Que siiiiii, que te mando la convocatoria....

- Y también se la mando a Paula...

- Venga, vale, hasta mañana..... Click!!!

Bajo la ventanilla mientras recojo el ticket del parquing.... - 4€ la hora.

Pienso, esto sí que es un negocio.

Otra mañana frenética para que no se me escape nada, con lo poco que me gusta llegar tarde al trabajo.

Ayer, en el parque, me torcí el tobillo y lo tengo bastante hinchado y morado. Lesionarse así, debería de ser baja laboral.

Mientras aparco, hago una segunda llamada para solucionar una consulta rápida y me dirijo a Urgencias, hasta que....

Lentamente...me paro...cierro los ojos como si me pesaran los párpados y me cago en todo bicho viviente...

"La mascarilla". No la he cogido al salir casa. Por suerte, recuerdo que en el maletero guardamos un neceser con algunas de recambio.

Es lo que tiene ser madre y que me gusta tener todo controlado. Soy de esas que se espabilan para conseguir herramientas que me ayuden a tener todo organizado y controlado...o al menos a que me faciliten la vida.

Tras explicar mi lesión al sanitario de recepción, busco donde esperar que un apuesto médico de urgencias me atienda (cuánto daño hacen las series americanas...)

Así que saco mi teléfono, y me conecto a Repasat para enviar la convocatoria de la formación de mañana, y reportar la otra llamada.

De paso reviso el resto de tareas, que mi super compis me han enchufado y las que voy completando.

Parece que mi apuesto médico, tiene mucho trabajo.... En las series que he visto, la espera vale la pena (así que me doy ánimos por la espera)

Vaya..llamada del gestor.... Suerte que tengo el timbre silenciado. Tengo uno de esos timbres peculiares que hace que todo el mundo se gire hacía ti.

Me pide el nif de uno de los trabajadores. Como estoy con los auriculares, sin colgar la llamada, accedo a la ficha del trabajador y con 4 clics, soluciono la demanda del gestor, del que me despido sin más.

Creo que voy a dejar ver las series de Netflix, mi apuesto médico, es lo más parecido a un fraile franciscano cercano a la jubilación,

Tras examinarme, decide que tengo un esguince y que necesito reposo. Aprovecho, y tal como me da la baja, la fotografío y la adjunto a la petición de baja que inicio en Repasat.

Por suerte!! Esta noche, la facturación se hará sola. Es lo que tiene ser espabilada y tener herramientas que me faciliten la vida.